Aún no es medio día,
ya van 4 tazas de café, unos 6 cigarros,
dos pastillas “pa” la “depre” y una ducha mal dada.
Mientras escribo, se termina el cigarro
deberé encender otro, para calmar esta ansiedad
y pronto otro cafecito haber si me quita este frió
de puta madre, que no se pasa,
será que el frió viene desde dentro,
desde el alma.
¿Será que existe el alma?
O solo es la endemoniada conciencia,
cerebro, mente o como quieran llamarlo.
¿Dónde habita esta maldita enfermedad?
Esa que no me deja salir de esta furia,
de esta asquerosa soledad.
Que me desespera, me destruye día a día,
no me deja aferrarme a la resurrección,
esta maldita adicción a la debilidad,
la melancolía, a todo lo que me hace daño.
Me pregunto porqué
porqué estar aquí sentada escribiendo,
porqué estar aquí pensando, justificando, culpando
idealizando, huyendo. Porqué extrañar, porqué necesitar
acaso no existo.
Quizá en tu adiós te llevaste todo,
el día, la noche, el futuro, el presente,
el llanto y la pena.
¿Es que no hay nada que me haga sentir?
no soy más que un témpano gélido,
que sobrevive tiempo- espacio,
sin mas que un par de recuerdos y una mochila llena de sueños
que nunca llegaran a puerto.
Que tal vez vivan por siempre en la conciencia
en la imaginación del ser sin alma…
ya van 4 tazas de café, unos 6 cigarros,
dos pastillas “pa” la “depre” y una ducha mal dada.
Mientras escribo, se termina el cigarro
deberé encender otro, para calmar esta ansiedad
y pronto otro cafecito haber si me quita este frió
de puta madre, que no se pasa,
será que el frió viene desde dentro,
desde el alma.
¿Será que existe el alma?
O solo es la endemoniada conciencia,
cerebro, mente o como quieran llamarlo.
¿Dónde habita esta maldita enfermedad?
Esa que no me deja salir de esta furia,
de esta asquerosa soledad.
Que me desespera, me destruye día a día,
no me deja aferrarme a la resurrección,
esta maldita adicción a la debilidad,
la melancolía, a todo lo que me hace daño.
Me pregunto porqué
porqué estar aquí sentada escribiendo,
porqué estar aquí pensando, justificando, culpando
idealizando, huyendo. Porqué extrañar, porqué necesitar
acaso no existo.
Quizá en tu adiós te llevaste todo,
el día, la noche, el futuro, el presente,
el llanto y la pena.
¿Es que no hay nada que me haga sentir?
no soy más que un témpano gélido,
que sobrevive tiempo- espacio,
sin mas que un par de recuerdos y una mochila llena de sueños
que nunca llegaran a puerto.
Que tal vez vivan por siempre en la conciencia
en la imaginación del ser sin alma…
3 comentarios:
Interesante texto, pero recuerda que uno en su locura derrama una onda caùstica en el mundo y cuando tratas de sostenerte los vìnculos se han desvanecido. No es culpa de nadie, se han cometido crimenes mayores.
Abre la puerta a la hiperactividad, disfrutala como un sorbo de licor y usala para la redención de las arterias y fines creativos.
te envio varios besos porque apenas me conoces y esa es una buena forma de volverse entrañable para los elegidos.
Si quieres escribeme a mi mail: berriosalfuturo@hotmail.com o en el jodido buzón que sale en el blog y otras pàginas.
de alguna manera tu texto me llego hasta el fondo de mi pequeño corazoncito roto,
mariposa sin alas ya
a principios de primavera.
me gusto mucho
ojala ya no estes tan triste chiquilla
te quiero loca
se me cuida a ver si algun dia nos vemos por ahi
La paupérrima (O nula) respuesta a mi comentario lo hacen obsoleto del todo, mis abogados se encargarán de compensarle por la la prosa, gestos amables y los parabienes que tal vez le causaron algún inconveniente. Como hoy es Octubre 13 2007, el resto es silencio.
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